Josiah McElheny

Josiah McElheny (Boston, Massachussets, 1966) es un artista que actualmente vive y trabaja en Brooklyn, Nueva York. Josiah estudió en la Rhode Island School of Design con maestros vidrieros como Ronald Wilkins, Jan-Erick Ritzman o Lino Tagliapietra. Sus obras son objetos e instalaciones frecuentemente basadas en hechos históricos e intentan fundir el pensamiento y la materia con la experiencia de mirar.

La obra de Josiah se ha visto en multitud de espacios y museos, entre otros en The Art Institute of Chicago (1998), la Bienal del Whitney Museum (2000), el Centro Galego de Arte Contemporáneo (2002) o el MoMA (2007). Además en el año 1995 recibió el premio de la Fundación Louis Comfort Tiffany.

Ahora ha regresado a España con la muestra Josiah McElheny. Espacio para un Universo Isla situada en el MNCARS (Madrid) hasta el 30 de marzo y cuyo discurso gira en torno a su escultura Island Universe.

La escultura multipartita Island Universe esta compuesta de cinco esferas de aluminio cromado y vidrio soplado, de las que surgen radios de diversa longitud rematados por discos, esferas de cristal y luces. Las diferentes longitudes de los radios metálicos están basadas en medidas de tiempo; los discos y esferas representan el agrupamiento de galaxias en el universo y las luces, los conocidos como quásars (los objetos más brillantes conocidos). Esta concepción del universo representada por las esferas podrá verse en el Palacio de Cristal del Parque del Retiro, mientras que la obra audiovisual que presenta en el edificio Sabatini, titulada Island Universe 2005-2008 consiste en una grabación de las lámparas que inspiraron la obra.

Según Lynne Cooke, comisaria de la exposición, se pueden detectar dos líneas de pensamiento. Por un lado, la referencia a la historia del diseño y el arte decorativo -dado que el artista estuvo muy influenciado por las lámparas del Metropolitan Opera House- y por otro, una visión cosmológica, referente al cosmos, la astronomía y el universo. Pero a su vez, se pueden observar otras dos líneas conceptuales, mientras la instalación plantea la reflexión del artista en un ámbito espacial, el vídeo ubicado en Sabatini lo hace a nivel temporal.