Octavo domingo de la sección #Arteenelcine
El artista y la modelo
A principios de los años 90, Trueba escribió en un
cuaderno cuatro páginas con el germen de esta película. En un principio
la tituló "Retrato del Artista Viejo", pero pronto pasó a llamarse "El
artista y la modelo", en recuerdo al primer óleo que había visto de
Pablo Picasso. No fue hasta 2005 que comenzó a trabajar en el guión y en
2011 cuando empezó el rodaje de la película.
La
historia narra la búsqueda de ideas del escultor Marc Cros (papel
interpretado por Jean Rochefort) mientras tiene como modelo a Mercè
(papel interpretado por Aida Folch). Una búsqueda de ideas que acontece mientras tiene lugar el proceso de creación de una obra de arte y mientras se enfrentan los caracteres de ambos personajes.
Marc es un
octogenario escultor que vive con su mujer Léa (papel interpretado por
Claudia Cardinale) y su sirvienta española María (interpretado por Chus
Lampreave). Un día, en la plaza del pueblo, Léa ve a Mercè dormida en la
calle, como una vagabunda, y la invita a su casa, considera que es la modelo adecuada para
su marido, por ello la alimenta y la propone ser modelo para Marc, quien
lleva sin trabajar desde el inicio de la guerra. Mercè no tiene ningún plan de futuro, está huyendo y lo único que busca es un refugio, por lo que acepta ser modelo de Marc, no sin antes preguntar en qué consiste ser modelo de un artista, ante la pregunta de Mercè, Léa le contesta "Te pagan por no moverte".
Al día siguiente Mercè y María suben al taller de Marc ubicado en la montaña y que no ha pisado nadie desde el comienzo de la guerra. Mercè observa el taller y mantiene las dudas sobre su futuro, pero no tiene más opciones por lo que mantiene la decisión de ser modelo. Mercè no es la típica modelo que se podría esperar, tiene las piernas llenas de heridas y arañazos y Marc se lo acabará reprochando.
Comienzan las sesiones de trabajo, Mercè posa para Marc, que la dibuja con carboncillo, pero acaba enfadándose consigo mismo porque no encuentra la idea que busca para crear.
Un día decide pintarla dentro del río, haciendo clara alusión a la obra "Desnudo al sol" de Renoir. Mientras Marc está pintando, Mercè, cansada de la pose decide nadar, atrapar un pez y lanzárselo a Marc. Ante el hieratismo de Marc, al que no le hace ninguna gracia la broma, Mercè decide retomar la posición en la que se encontraba.
Otro día decide pintarla en mitad del campo, momento en el que Marc le explica a Mercè las cualidades de la luz natural y el potencial de la naturaleza como obra única. Pero Mercè se sigue preguntando para qué sirve posar, "¿Cómo hace para encontrar una idea?" le pregunta a Marc quien responde "No lo sé, aún no la he encontrado", esta respuesta deja aún más perpleja a la modelo, quien no comprende nada y se pregunta cuando terminará su trabajo. Pero Marc acaba bruscamente la conversación: "Me haces preguntas tontas, tengo que hacer una escultura con guerra o sin ella".
La guerra es uno de los temas siempre presentes en esta película, ya que se ambienta en el verano de 1943, en Céret, un pequeño pueblo francés cerca de la frontera española. Mercè se ha fugado de un campo de refugiados a una Francia también ocupada y se encarga de ayudar a los maquis a pasar la frontera por la noche.
Una noche, Mercè sale a bañarse al río y se encuentra con un maquis, entre los dos entierran a un norteamericano y Mercè se lleva al chico al taller, ya que se encuentra herido. A Marc no le gusta la idea de tener en su taller una banda de clandestinos, pero mientras están discutiendo aparece Werner, un general alemán.
La visita de Werner
El general Werner es además profesor de Historia del Arte en Múnich, y está escribiendo un libro sobre la obra de Marc, el cual presenta a Mercè como su modelo y al maquis, Pierre, como su ayudante, para no levantar ninguna sospecha.
Marc se siente nervioso ante la idea de que Werner haga fotografías de sus bocetos, para él únicamente son eso, bocetos, y lo que cuenta es el resultado. Sin embargo Werner no comparte esa idea y le indica que en su libro quiere también mostrar el proceso y la importancia que tiene en su obra.
Al despedirse Werner le confiesa que la situación está muy tensa, y por ello está escribiendo el libro a escondidas. Marc se da cuenta que seguramente, con el nuevo destino de Werner en Rusia, lo más probable es que no lo vuelva a ver.
Cuando Werner se va, Mercè le pregunta a Marc si es conocido fuera de Céret, a lo que Marc no puede negar la evidencia de que es muy conocido fuera y de que ahora ella también lo será, ya que Werner la ha fotografiado. Esta trascendencia artística de Marc descubierta por Mercè hace que la chica se sorprenda y empiece a valorar más a Marc.
Recuerdo a Rembrandt
Los principios de la relación profesional entre Marc y Mercè, no son fáciles, él la regaña porque no para de moverse mientras está posando, porque ha cambiado su peso o porque tiene manchas de sol.
Poco a poco, Marc y Mercè van cogiendo más confianza entre sí y un día Marc le enseña un dibujo muy especial, para él "el dibujo más bello del mundo". Cuando Mercè lo observa lo único que dice es "Bonito", Marc enfadado le da una clase magistral de dibujo: "Se trata de un pequeño esbozo de Rembrandt, una obra maestra que no pretendía serlo". Marc le desvela la ternura de los personajes ayudando a dar los primeros pasos a un niño situado en el centro de la escena, frente a su padre y una vecina. Mercè se adentra en la obra y quiere saber más sobre ese pequeño instante capturado por Rembrandt como una instantánea. Marc insiste en la importancia de la idea: "¡Rembrandt aquí la tenía, vaya si la tenía!".
La gran obra basada en Maillol
En una de las sesiones de trabajo, Marc se enfada mucho con Mercè, quien cambia la postura mientras Marc está distraído. Marc ve la nueva postura de Mercè y se da cuenta de que esa es la que quiere reflejar.
La ordena volver a ponerse en esa posición, y hace esbozos de la misma. En ese momento vemos a un escultor pletórico, por fin ha encontrado la posición que buscaba. Una posición que es la que aparece reflejada en la escultura "La mediterranée" de Aristide Maillol, realizada en 1905.
Sin embargo, durante la creación de la obra, Mercè le comenta que ha de acompañar a Pierre hasta la frontera prometiendo volver al día siguiente. Marc está nervioso, piensa que Mercè no volverá, su mirada desvela una enorme tristeza y desesperación por el miedo de no poder acabar la escultura. Pero Mercè regresa y continúan trabajando. Tras un momento de tensión sexual, Marc huye del taller para volver al día siguiente y tocar a Mercè que aún duerme. Ella le acaricia el rostro y él acaba llorando.
Después de una conversación sobre la existencia de Dios y la teoría de Marc sobre Adán y Eva, donde indica: "los hombres son un accidente, un accesorio, pero la mujer es la forma esencial", vuelven al taller para acabar de trabajar en la escultura.
Cansada de posar Mercè le pregunta si ya ha terminado y por tanto se puede ir. Él le dice que está acabada y puede irse cuando quiera. Mercè no está contenta con la respuesta y acaba reprochando a Marc que no se parece en nada a la escultura, ante la impertinencia el escultor la responde: "¿Acaso pensabas que estaba haciendo un retrato?", volviendo a poner énfasis en la importancia de la idea por encima de la representación fidedigna.
Mercè se pregunta si podría seguir haciendo de modelo cuando acabe la guerra, Marc no tiene dudas, de hecho le entrega una carta de recomendación y le indica que vaya a Marsella, donde tiene amigos para los que podría posar.
La película finaliza con la mujer de Marc yendo a visitar a su hermana enferma y Mercè yendo en bicicleta hacia Marsella, cerrando la relación que comenzó cuando se encontraron en la plaza del pueblo.
La película finaliza con la mujer de Marc yendo a visitar a su hermana enferma y Mercè yendo en bicicleta hacia Marsella, cerrando la relación que comenzó cuando se encontraron en la plaza del pueblo.
5 puntos clave de El artista y la modelo:
· Las magistrales interpretaciones de Jean Rochefort y de Aida Folch en los papeles de Marc Cros y Mercè.
· El taller: es el principal decorado de la película, un minúsculo espacio lleno de arte en la montaña donde se pronuncian las palabras justas, cuyo significado se acentúa con las miradas que se intercambian los personajes, especialmente Mercè que pasa de tener una mirada furtiva a mirar llena de curiosidad, para finalmente mirar con aprecio a Marc.
· Michel Brigand, un pintor y escultor de Céret, de la misma edad que Marc cuyas manos serán las manos de Jean Rochefort cuando Marc dibuja o esculpe.
· Trueba entrelaza en esta película tres grandes temas: el
arte, la vida y la muerte. Si Mercè representa la juventud, la vida y el
futuro, Marc Cros menciona en varias ocasiones la presencia de la
muerte y el poco tiempo que le queda de vida. El arte es el tema que les
une durante los más de 100 minutos de película.
· El artista y la modelo
es, sin duda, una película madura, que representa al igual que la
propia historia narrada la necesidad de madurar la idea, realizar el
guión y posteriormente grabar. Era una película que Trueba tenía en
mente, una película que acaba siendo un homenaje al arte y especialmente
al acto de crear y de buscar la belleza reflejando finalmente la fusión
entre el mundo interior y el exterior.
Sección: 30 Domingos de Arte en el cine
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